Una situación sumamente tensa se vivió en Cancún cuando un grupo de individuos, vestidos como agentes de seguridad y portando armas de fuego, ingresó de manera abrupta al hogar de José Alberto Trejo, un reportero especializado en temas policiales. La inesperada irrupción del grupo generó alarma y desconcierto, especialmente ante la presencia de armamento y capuchas.
Ante esta inquietante escena, la esposa de José Alberto Trejo no pudo contener sus lágrimas y su angustia. En un giro sorprendente, el reportero policiaco decidió utilizar una transmisión en vivo para documentar la situación, lo que en última instancia evitó su detención.