El Colegio de Ingeniería de la Universidad de Utah, encargados de desarrollar y mejorar las cualidades del Brazo “Luke” desde el 2008, han logrado que la prótesis inspirada en el icónico personaje de Star Wars, cobre mayor fuerza, tenga una mejor precisión en sus movimientos y permitirá a todos sus usuarios, volver a experimentar la sensación del tacto.
Los ingenieros colocaron en la prótesis un nuevo sistema de biorretroalimentación con el que llevaron al Brazo Luke”, a su máxima evolución. Los propietarios de la prótesis, podrán sentir el contacto con objetos, levantarlos y apretarlos sin romperlos por más frágiles que sean, además, se podrá controlar la prótesis de manera mucho más precisa y llegará el momento en que incluso, puedan percibir el dolor.
Aunque el Brazo Luke, ya se encuentra en el mercado desde el 2015, pero esta nueva función, sigue en fase de prueba. Un estudio publicado en la revista especializada Science Robot, explica que recobrar la sensibilidad para personas que han sufrido de alguna amputación, es posible gracias a que “las grabaciones electromiográficas de los músculos residuales del brazo se descodificaron para proporcionar un control independiente y proporcional de una prótesis de mano y muñeca de seis DOF, el ‘brazo Luke’”.
Para proporcionar biorretroalimentación y un control preciso de la prótesis, se implantaron electrodos en el área de los nervios medial y cubital, además de ocho sensores electromiograficos, que manda señales a la computadora que es el ‘cerebro’ de la prótesis, teniendo como resultado una retroalimentación sensorial.
Hasta el momento, el brazo Luke con sistema de biorretroalimentación, se ha experimentado en siete personas, siendo un éxito en cada uno de los casos. “El usuario mostró una mayor precisión en la fuerza de agarre y fue más capaz de manejar objetos frágiles, mientras que, con la exploración activa, el usuario también pudo distinguir entre objetos grandes y pequeños y entre los blandos y los duros”. Menciona el estudio.
El profesor Gregory Clark, un ingeniero biomédico de la Universidad de Utah y coautor del estudio, dijo a The Independent que “Una de las primeras cosas que quería hacer con el ‘brazo Luke’, era ponerme el anillo de matrimonio. Eso es difícil de hacer con una mano. Fue muy conmovedor“. Mientras que los otros participantes, fueron capaces de hacer otras tareas que anteriormente les habían resultado difíciles como levantar y oprimir un huevo sin romperlo, quitar las uvas de un racimo o poner una funda dentro de una almohada.
Lo mejor, es que el ‘brazo Luke’ no solamente permitirá que algunas personas recobren la sensibilidad,. Adicionalmente vienen implicada otros factores como la mejora del estado psicológico y psicosomático de los dueños de la prótesis, una autoestima mucho mas elevada. Además de quede los usuarios, al volver a tener el control de la motricidad fina con lo que pueden hacer cosas que antes eran imposibles.
Con información de: Adriana Alanís