Tras días de intensa búsqueda, finalmente la Guarda Costera de Estados Unidos confirmó este jueves que el sumergible perdido que iba a explorar los restos del Titanic sufrió una “implosión catastrófica” en la que murieron sus cinco ocupantes. De esta manera, se ponía fin a la instensa búsqueda iniciada el domingo cuando se perdió la señal del Titan y que se mantenía con la esperanza de encontrar con vida a los desaparecidos.
Una vez se ha descubierto que la causa de que se perdiera el contacto con el submarino fue una implosión, se confirma que sus ocupantes han fallecido. Este fenómeno es lo opuesto a una explosión y se debe a la presión ejercida sobre el Titan hacía el centro de sí mismo al haber descendido a niveles tan profundos.