Frente a los altos índices de violencia y hechos delictivos en México, se hace urgente cambiar el rumbo de la política prevista en el Plan Nacional de Seguridad Pública, subrayó el diputado Humberto González Villagómez, presidente de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil de la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado.
Este sábado el Pleno Legislativo aprobó el dictamen sobre el exhorto propuesto por Humberto González mediante el cual se exhorta al titular del Poder Ejecutivo Federal, para que tenga a bien realizar las modificaciones necesarias en el Plan Nacional de Seguridad Pública, que generen estrategias para reducir la incidencia delictiva, contribuyan en la generación y preservación del orden público y la paz social, y permitan alcanzar el estado de derecho en nuestro país, en favor del bienestar de todos los mexicanos y los bienes jurídicos tutelados por la ley.
El diputado integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática, señaló que los números no mienten, más bien dan fe y cuenta de que el Plan de Seguridad no está dando buenos resultados, máxime si se espera que la delincuencia “se porte bien”, a través de simples invitaciones hechas por el Presidente de México.
“Frente a las cifras es lógico y razonable pensar que en un país azotado por la delincuencia como lo es México, el poder público no puede ser laxo, ya que al hacerlo pone en riesgo su propia existencia, mucho menos puede dejar al arbitrio de las autoridades responsables de la seguridad pública, la aplicación de la ley; por el contrario, el poder público debe ser enfático en su actuar, si es que se pretende alcanzar la justicia en todos los niveles y si es que se pretende el estado de derecho”.
El legislador por el Distrito de Puruándiro refirió que del primero de diciembre del 2000, al 31 de agosto del 2001, se registraron 10,764 homicidios dolosos. Posteriormente, con Felipe Calderón, en sus primeros 9 meses de gestión, hubo 8,701 homicidios del mismo tipo. Después, con Enrique Peña Nieto, del 1 de diciembre de 2011 al 31 de agosto de 2012, la cifra aumentó drásticamente, registrándose 16,318 asesinatos. Finalmente, en los primeros nueve meses de la administración actual, se han registraron 22,126 homicidios dolosos.
Humberto González Villagómez subrayó que el Gobierno Federal no puede continuar rehuyendo a su responsabilidad, ni pretender evadirla con expresiones como “fuchi” o un “guácuala”, ya que la seguridad es un tema prioritario, de profunda complejidad que debe ser tomada con toda la seriedad necesaria, corrigiendo el rumbo y generando certeza aunque sea mínima de que algo de lo que se realiza puede dar resultados.