El agobiante calor de hasta 32 grados en Nezahualcóyotl, Estado de México, afecta especialmente a familias como la de Maricela Tenorio, quienes carecen de opciones de refugio en sus viviendas con techos de láminas de cartón.
Ante el calor intenso en Nezahualcóyotl, Estado de México, las familias, como la de Maricela Tenorio, se ven obligadas a buscar sombra fuera de sus viviendas de la colonia Esperanza, cuyos techos de láminas de cartón no brindan protección suficiente.
Viviendas precarias en Nezahualcóyotl, Estado de México, sufren las altas temperaturas con techos de láminas que no ofrecen respiro, como es el caso de Maricela Tenorio y su familia en la colonia Esperanza.
Debido a la precariedad de su situación, han improvisado una o dos pequeñas aberturas en sus viviendas de tamaño reducido (de tres por tres metros), que funcionan como comedor, cocina y dormitorio para hasta nueve personas, como en el caso de Maricela. Por lo tanto, el calor se convierte en un problema grave para ellos.
“Hemos experimentado enfermedades relacionadas con el calor, como aumentos repentinos de temperatura o mareos en los niños. En esos casos, debemos llevarlos adentro y aplicarles compresas frías. Además, debemos ser cuidadosos con los alimentos para evitar que se estropeen, ya que no podemos almacenar mucho y solo podemos adquirir lo necesario para nuestro consumo diario”.
Dado las condiciones precarias en las que viven, han improvisado una o dos pequeñas aperturas en sus reducidas viviendas de tres por tres metros, que cumplen la función de comedor, cocina y dormitorio para un máximo de nueve personas, tal como sucede en el caso de Maricela. Por consiguiente, el calor se convierte en un problema grave para ellos.
“Hemos experimentado problemas de salud relacionados con el calor, como repentinos aumentos de temperatura corporal o mareos en los niños. Ante estas situaciones, debemos llevarlos al interior y aplicarles compresas frías. Además, debemos ser extremadamente cautelosos con los alimentos para evitar que se deterioren, ya que nuestras limitaciones nos impiden almacenar grandes cantidades y solo adquirimos lo necesario para nuestro consumo diario”.