El Derecho a la Ciudad
¿QUÉ DEBO SABER DEL CAMBIO CLIMÁTICO?
Salvador García Espinosa
Lo que se denomina “cambio climático” y que engloba las variaciones en el estado del clima que acontecen en el Planeta Tierra, debe entenderse como los cambios acontecidos sobre las condiciones climáticas, pero provocados por la especie humana. De manera particular por la explotación irracional de recursos naturales como bosques, agua, petróleo, gas y por la generación de gases de efecto invernadero producto del uso de combustibles fósiles.
Ante la gravedad de la emergencia ambiental que enfrentamos en el Planeta, en 1988 se conformó un Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en donde participan los 195 países miembro de la ONU. Este Panel tiene un carácter eminentemente científico y su principal objetivo es realizar evaluaciones integrales con base en los conocimientos científicos, técnicos y socioeconómicos sobre el cambio climático. En la primera semana del presente mes de agosto se presentó su informe más reciente y, aún y cuando desafortunadamente no fue motivo de los encabezados periodísticos y titulares de noticieros, es información que debemos conocer todos los individuos que habitamos el Planeta y por lo cual destaco solo algunos aspectos relevantes de dicho informe:
- Las últimas cuatro décadas han sido sucesivamente más cálidas que cualquier otra década anterior desde 1850. La temperatura global del Planeta entre 1850 y 1900 se incrementó 0.8 grados centígrados, mientras que entre 2010 y 2019 el incremento fue de 1.07 grados centígrados. La influencia humana ha calentado el clima a un ritmo sin precedentes considerando los últimos 2,000 años. El informe considera que el calentamiento global continuará y de forma más intensa. Incluso si hoy los países comenzaran a reducir drásticamente sus emisiones, el calentamiento global probablemente aumentaría alrededor de 1,5 grados centígrados durante las próximas dos décadas.
- La precipitación pluvial sobre la Tierra ha presentado un aumento desde 1950, pero más significativamente a partir de 1980 a la fecha. El hombre ha contribuido a un aumento en las sequías agrícolas en algunas regiones debido al aumento de la evapotranspiración de la tierra, los estudios realizados señalan también que la incidencia humana provocará un aumento en las precipitaciones intensas asociaciadas a los ciclones tropicales, así como en la variabilidad en las precipitaciones globales en la mayoría de las regiones terrestres, dentro de las estaciones y de un año a otro.
- El calentamiento de los océanos, al menos en su capa superior, es decir, los primeros 700 metros a partir de la superficie, se ha calentado desde la década de 1970 y las emisiones de CO2 causadas por la actividad humana, son la principal causa de la acidificación de las aguas oceánicas. El estudio indica que los niveles de oxigeno has disminuido en muchas regiones del océano desde mediados del siglo XX a la fecha. El pH (acidez) que se presenta en la superficie del océano no se había presentado en los últimos 2 millones de años. Según las múltiples evidencias, la estratificación del océano superior, la acidificación del océano y la desoxigenación del océano continuarán aumentando en el siglo XXI.
- El aumento en el nivel medio del mar también se ha incrementado con la actividad humana. Entre 1901 y 1971, fue de 1.33 mm. Mientras que sólo entre 1971 y 2006, el incremento fue de 1.9 mm y entre 2006 y 2018 los registros indican 3.77 mm. Es prácticamente seguro que el nivel medio mundial del mar seguirá aumentando durante el siglo XXI. Por esta razón, se proyecta que los eventos extremos que ocurrieron una vez por siglo en el pasado reciente ocurrirán al menos una vez por año en el futuro próximo. El pronostico de aumento medio mundial del nivel del mar para 2100 es de 1,88 m y de hasta 5 m para el año 2150.
- Entre 2011 y 2020, la superficie de hielo marino del Ártico alcanzó su nivel más bajo desde 1950. El retroceso de los glaciares que se ha presentado no tiene precedentes al menos en los últimos 2 mil años. Los pronósticos presentados en el Informe indican que la pérdida de hielo continuará durante el siglo XXI, siendo prácticamente seguro que la capa de hielo de Groenlandia desaparezca y muy probablemente también la de la Antártida.
- En 2019 las concentraciones de CO2 atmosférico fueron las más altas en los últimos 2 millones de años y las concentraciones de CH4 y N2O las más altas en al menos 800,000 años.
El panorama es alarmante, pero aún así, algunas personas optan por ignorar la realidad y seguir pensando que la naturaleza esta para explotarse y lograr un beneficio económico. La evidencia científica demuestra que la influencia humana ha calentado la atmósfera, el océano y la tierra. Ignorar la realidad ambiental no evitará que sigamos escuchando como las olas de calor matan cada vez a más personas, como ocurrió el año pasado en Estados Unidos y Canadá; o de inundaciones como las que devastaron Alemania y China, así como incendios forestales incontrolables como los que se presentaron en Siberia, Turquía y Grecia.
Es preciso comprender que, nuestro estilo de vida y modelo de consumo ha producido efectos negativos sobre la atmósfera, el océano y la biosfera, que hoy amenazan nuestra propia existencia en el Planeta Tierra. No podemos esperar a que el gobierno actué, y nos diga que hacer, debemos cambiar, tomar acciones en lo personal, en lo familiar y en el ámbito laboral. Todas las acciones cuentan, asumamos nuestra responsabilidad, la supervivencia de nuestra especie en el Planeta Tierra depende de lo que, cada uno de nosotros haga en los próximos años, para detener el deterioro ambiental, ninguna acción es insignificante, se ocupa de todas las acciones tendientes a disminuir el consumo de plásticos, electricidad, combustibles, disminuir la dependencia a fuentes de energía no renovable, eliminar el consumo de madera, además de controlar la expansión irracional de nuestras ciudades y aumentar la superficie de áreas verdes, entre otras muchas otras acciones.