Necesario que política de salud que incluya conocimientos en materia médica y terapéutica: Humberto González

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Es necesario que dentro de la política de salud en Michoacán todos aquellos conocimientos en materia médica y terapéutica para que puedan ser reconocidos como métodos para atender padecimientos de la salud, subrayó el diputado Humberto González Villagómez, integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado.

El diputado por el Distrito de Puruándiro conminó a las comisiones legislativas, a dictaminar la iniciativa que presentó en mayo de 2019 para reformar la Ley de Salud del Estado, con el fin de reconocer la medicina tradicional indígena e incorporarla a las políticas de salud en Michoacán.

Recordó que el Gobierno del Estado no tiene la rectoría de la política de salud en materia de medicina tradicional e indígena, y su papel debe ser cooperar considerando las condiciones económicas, geográficas, sociales y culturales que a nivel comunitario se manifiesten, recae en la comunidades y pueblos indígenas decidir la forma en que se incluirán en la política de salud.

Por ello la intención de reformar la norma para que el Sistema Estatal de Salud tenga la obligación de procurar inversión pública para la conservación y protección del conocimiento médico indígena, y así promover el desarrollo y los conocimientos y que las autoridades sanitarias puedan prescribir sus métodos como una opción posible para los usuarios del sistema de salud.

Humberto González Villagómez apuntó que la posibilidad de que los pueblos indígenas puedan acceder a un padrón de prestadores de servicio, permitiría que los usuarios conozcan ante quienes pueden asistir a tratar los diversos padecimientos de salud, de manera que los usuarios decidan sobre la opción médica que mejor se ajuste a sus necesidades.

Destacó la importancia que la legislación establezca que la medicina tradicional e indígena, nace de la construcción de una cosmovisión a lo largo de los años, dando vida a un sistema de prácticas terapéuticas con fines medicinales, con base en una aceptación del cúmulo de saberes en torno a la salud y enfermedad que los pueblos indígenas originarios han acopiado y organizado a lo largo de su historia.