Morelia, Michoacán, a 29 de enero de 2020.- Las comunidades purépecha, son pueblos pintorescos en donde se encuentran viviendas tradicionales centenarias conocidas como trojes, en especial en la Meseta Purépecha.
Carpinteros especializados fabricaron o fabrican las trojes, con una técnica que se ha transmitido de padres a hijos, la troje refleja el estilo de vida de estas comunidades purépecha, además, de jugar un papel importante dentro del entorno familiar ya que la troje principal es el núcleo del hogar.
Las trojes son construcciones de madera con techo a cuatro aguas de tejamanil, en la parte superior se habilita un tapanco o granero para el maíz, frente a la troje se construye la cocina, donde se concentra la vida familiar, las trojes en su interior son dormitorio y oratorio y en el exterior cuentan con un portal cubierto que sirve de recibidor para visitas y reuniones.
La Meseta Purépecha no solo ofrece a turistas y visitantes la gastronomía tradicional sino que además, tendrán la oportunidad de conocer la arquitectura tradicional purépecha, ya que encontrarán trojes con una antigüedad de 200 años o más, con vigas profusamente talladas y puertas con finos labrados, “la troje es una preciada herencia que pasa de padres a hijos”.
Las trojes en Michoacán, algunas con más de 200 años, se forman de gruesos tablones hábilmente unidos por poderosos tacos de madera, sin usar clavos, sus techos son de caballete, cuyos volados forman amplios portales.
En comunidades como Angahuan, Sevina, Pichátaro, Paracho o Zacán, aún se pueden encontrar muestras de estas hermosas construcciones, muestra de la cultura viva de Michoacán y un referente de la cultura purhépecha, muestra de la arquitectura tradicional michoacana.