La madrugada del día ayer 09 de febrero se difundió la entrevista realizada el mismo día al presidente de Rusia Vladimir Putin por parte de Tucker Carlson, expresentador estelar de Fox News.
Carlson actualmente continúa como una de las voces más influyentes de la ultraderecha trumpista estadounidense a través de su propia plataforma en Internet y sus canales en redes sociales.
La entrevista duró poco más de dos horas y en ella principalmente el mandatario ruso detalló los argumentos del Kremlin para emprender la invasión a Ucrania que está por llegar a su segundo año y confirmó su disposición a buscar una salida negociada siempre y cuando se respeten los términos de su país, además detalló las razones del deterioro de sus relaciones con Washington.
Esta entrevista es un fenómeno, puesto que es la primera entrevista que concede Vladimir Putin a un periodista extranjero desde el inicio de la guerra en Europa del Este y en a tan solo 14 horas de la grabación publicada sumaba más de 100 millones de visualizaciones.
Además, sucede en el marco donde Donald Trump se consolida como práctico ganador de la nominación del Partido Republicano para las próximas elecciones presidenciales de noviembre de Estados Unidos, mientras que el presidente demócrata y aspirante a la reelección Joe Biden ve erosionada su popularidad debido a su polémica donde se le cuestiona sus capacidades mentales debido a su avanzada edad.
También, Biden ha batallada para lograr la aprobación legislativa de un paquete presupuestal militar de 118 mil millones de dólares, en los cuales incluyen 60 mil millones de dólares de ayuda a Kiev, aunque es lógica al ver la gruesa entrega de armamento y ayuda financiera a Volodimyr Zelensky pierda respaldo cuando se han disipado todas las esperanzas de un triunfo por parte de Ucrania.
En dicho contexto el diálogo entre Putin y Carlson agitan sin dudas el escenario electoral en Estados Unidos, apunta a debilitar la posición de Joe Biden y el escenario bélico en Europa del Este tiene todos los visos de ser terreno para negociaciones entre la Casa Blanca y el Kremlin en caso de una victoria de Trump.