El aspartamo, un edulcorante no calórico que se utiliza en distintos productos alimenticios, como los refrescos light, podría ser declarado cancerígeno por la Organización Mundial de la Salud (OMS). En julio, se emitirán las nuevas recomendaciones para su consumo.
Descubierto en 1965 por el químico estadounidense James Schlatter, el aspartamo es más dulce que el azúcar común. Fue aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de los EU en 1974 para su uso como edulcorante y como aditivo en la goma de mascar, cereales para el desayuno y bases secas para alimentos.
En los productos se puede encontrar como E951, que es el nombre que recibe en el listado de aditivos alimentarios.
Un sitio especializado sobre este edulcorante señala que el aspartamo se encuentra en los siguientes productos:
- Pastillas de menta para el aliento
- Bebidas refrescantes carbonatadas
- Cereales
- Chicle
- Productos de agua saborizados
- Novedades de helado congelado
- Cremas de fruta para untar
- Gelatina sin azúcar
- Caramelos duros
- Cubiertas para helado
- Helados sin azúcar añadido o libres de azúcar
- Té helado a base polvos
- Té helado listo para beber
- Mezcla de cacao instantáneo
- Mermeladas y jaleas
- Mezclas de jugos
- Bebidas de jugos
- Sustitutos de comidas
- Mousse
- Pastelillos sin azúcar añadido
- Bebidas refrescantes de dieta no carbonatadas
- Barras nutritivas
- Bebidas refrescantes a base de polvos
- Bebidas nutricionales proteínicas
- Pudín
- Caramelos blandos masticables
- Galletas sin azúcar
- Kétchup sin azúcar
- Edulcorantes de mesa
- Bebidas vegetales
- Yogur bebible
- Yogurt sin grasa
- Yogurt sin azúcar
Existe evidencia que plantea preguntas sobre el impacto potencial del aspartame en el riesgo de cáncer. Un estudio en Francia que involucró a 100,000 adultos el año pasado sugirió que aquellos que consumían grandes cantidades de edulcorantes artificiales, incluido el aspartamo, tenían un riesgo de cáncer ligeramente mayor. Otro estudio del Instituto Ramazzini en Italia a principios de la década de 2000 informó que algunos tipos de cáncer en ratones y ratas estaban relacionados con el aspartamo.