La Asociación de la Industria de Detergentes y Cuidado Personal explica que la mayoría de los productos de cosmética duran sin abrir al menos 30 meses desde el día de su fabricación. Si no se alcanza este plazo, debe indicarse una fecha de consumo preferente. Este puede encontrarse detallado en el envase de los respectivos artículos y puede examinarse antes de efectuar la compra acumulativa prevista.
Productos como geles de ducha, pastas dentífricas o cremas se mantienen, cerrados, durante más de 30 meses. O sea que, si se los almacena adecuadamente, pueden durar varios años sin perder calidad.
En lugar de una fecha de uso preferente, la vida útil después de la apertura se indica en el envase en meses, por ejemplo “6 M” para seis meses, en combinación con el símbolo de un tarro de crema abierto. Pero también hay productos que no llevan este símbolo, por ejemplo, aquellos que se utilizan una única vez, como por ejemplo las muestras de producto.
Es importante tener en cuenta el aspecto y el olor de los productos de cosmética antes de usarlos, ya que si estos se han alterado, es mejor descartar el artículo. Para aumentar la durabilidad de cremas, bases de maquillajes y otros productos de cosmética, es recomendable abrir el envase solo cuando se vaya a utilizar el producto y luego volver a cerrarlo con cuidado. Asimismo, es importante extraer las cremas directamente del tarro solo con las manos limpias y es mejor utilizar una espátula para este fin.
Las esponjas de maquillaje, pinceles u otros utensilios para desmaquillar y aplicar el maquillaje también deben lavarse regularmente con jabón, detergente líquido o un champú suave, y solo deben reutilizarse cuando vuelvan a estar completamente secos.