
El Derecho a la Ciudad
¿ABUELOS EN EXTINCIÓN?
Salvador García Espinosa
El pasado jueves 28 de agosto se celebró el Día de los Abuelos, dicho festejo inició en tiempos del presidente Abelardo L. Rodríguez, en la década de 1930, con el objetivo de rendir homenaje a la importante labor de los abuelos en la sociedad. La fecha coincide con la celebración católica de San Agustín de Hipona, que representa sabiduría y enseñanza, valores que, sin duda, se asocian al papel de los abuelos dentro de la familia.
La fecha seguramente pasó inadvertida para muchos de nosotros, seguramente porque en la actualidad son muchas las celebraciones, o bien, porque ya no viven nuestros abuelos ni tampoco somos abuelos. Considero que vale la pena reflexionar en torno a que, si bien para el año 2050, cerca del 30% de los habitantes de México tendrán 65 años o más, cada vez será menor la cantidad de quienes lleguen a tener la condición de abuelos o abuelas. Al menos si se consideran los siguientes 3 factores:
1. Menos hijos por familia. Una realidad ineludible es considerar que la cantidad de hijos que una mujer llega a tener ha disminuido significativamente en los últimos 50 años. Tan sólo basta pensar que en 1970 las mujeres tenían en promedio 7 hijos, para el año 2000, éste disminuyó a 2.6 hijos por mujer, en 2010 a 2.3 por madre, mientras que para 2020 la cifra se situó en 2.1 hijos, para 2024 la disminución continuó y la tasa de fecundidad llegó a sólo 1.6 por mujer. Como consecuencia de lo anterior las familias en México son cada vez más pequeñas, tan solo para el 2020 cerca del 36% de los hogares reportaron tener sólo uno o dos integrantes como máximo.
2. Menos matrimonio. Un factor decisivo es la reducción en el número de matrimonios. A pesar de que la población ha aumentado significativamente, baste señalar que en 1950 éramos poco más de 26 millones de personas, mientras que para 1980 aumentamos a casi 67 millones, para el año 2000 llegamos a casi 100 millones y en 2020, en México vivían 126 millones de personas, de acuerdo con el INEGI. Sin embargo, el número de matrimonios ha descendido, en 1999 había 1,823 diarios, para 2021 se registraron 1,241 casamientos cada día y para el 2020 sólo 919, es decir que en las últimas dos décadas las uniones civiles han disminuido 50%.
3. Mayoría de edad de la madre. La fecundidad en mujeres de 15 a 19 años ha experimentado un descenso notable del orden del 30% en el último quinquenio. Mientras que la fecundidad más alta que antes se alcanzaba en el grupo de mujeres de entre 20 a 24 años de edad, la información más reciente de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) a 2023 muestra que la fecundidad ha aumentado para el grupo de mujeres de entre 25 y 29 años. Más aún, de acuerdo con la OCDE, la tasa de fertilidad de mujeres de 40 a 44 años ha superado la tasa de nacimientos entre adolescentes en varios países miembros.
Los tres factores señalados, en el marco de una situación económica precaria que dificulta el acceso a un empleo bien remunerado, que les garantice a los jóvenes de hoy estabilidad a largo plazo, han conformado en conjunto un escenario en el que cada vez se casan menos, se tienen menos hijos y a una edad cada vez mayor que hace suponer que en dos o tres generaciones, las personas consideradas abuelas serán muy pocas.
Finalmente, si usted, amable lector, es abuelo, abuela o goza aún de la dicha de contar con un abuelo o abuela, disfrute su compañía al máximo, porque tal vez sea usted parte de la última generación que tenga esa dicha.