Un barco de pasajeros rescató a una niña de 4 años cerca de la costa de la ciudad de Antirrio (Grecia), después que la fuerte corriente del mar Mediterráneo la alejara de la playa donde estaba nadando con sus padres, informan medios locales.
Grigoris Karnesis, un veterano capitán griego de ferry, vio a la menor y alerto a las autoridades.
Karnesis, el capitán del Salaminomachos de 50 años, se apresuró a acercar su ferry de 100 metros de eslora hasta el unicornio para rescatar a la niña. A medida que se aproximaban, la tripulación del ferry podía escuchar sus gritos.
Tuvo que maniobrar la embarcación —que puede albergar más de 300 autos y 500 pasajeros— lo suficientemente cerca para que alguien pudiera sujetarla sin volcar el unicornio inflable. El capitán también tuvo que cuidar que el unicornio no fuera arrastrado por la resaca del motor del barco. Apagó el motor delantero para “crear un lago”, dijo, alrededor del ferry.
“Se encontraba en estado de shock. Estaba bien agarrada a ese flotador y no se movía, estaba petrificada”, detalló Karnesis. “Cuando nos vio y la rescatamos, se atragantó”, agregó.
Unos minutos después el barco atracó en el puerto de Antirrio, donde los padres de la niña, que habían avisado sobre su desaparición, la esperaban. Según recordó el capitán, la madre estaba en un estado similar al de su hija. “El impacto fue grande para ambas”, subrayó.
Kritsonis dijo que había publicado el video “para mostrar el peligro de los juguetes marinos que todos usamos”. Los comentarios en redes sociales rápidamente culparon a los padres. La familia no ha aceptado las solicitudes de entrevista y hasta el viernes no se les había podido contactar. Karnesis dijo que las críticas eran injustas.
