La Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (ISA) ha inaugurado una conferencia de dos semanas en Jamaica para que los países discutan la regulación de la minería en aguas profundas.
A pesar de la creciente oposición de científicos, investigadores y organizaciones de la sociedad civil, la minería submarina es una actividad que se está considerando. Sin embargo, estudios recientes demuestran que el fondo del mar es un tesoro de biodiversidad y sirve como un sumidero de carbono de importancia crítica ante la emergencia climática.
La minería submarina tiene el potencial de dañar importantes pesquerías como la de atún. En contraste, las acciones para proteger los océanos generan mayores ganancias para las comunidades pesqueras. El doctor Enric Sala, explorador residente de National Geographic y fundador de Mares Prístinos (Pristine Seas), alertó que la minería submarina es una amenaza para la frágil y desconocida vida en las profundidades de los océanos.
La Alianza Oceánica Sostenible México, conformada por Naturalia, Greenpeace, Beta Diversidad, Mares de México, Alianza Salvemos a la Laguna y la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente (AIDA), lanzó un exhorto a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), para que sean responsables con los compromisos adquiridos a nivel internacional y mantengan un papel a favor de la conservación de los océanos y contra la minería submarina.
La ISA es un organismo de la ONU fundado en 1994, con sede en Kingston, Jamaica, que es responsable de regular la minería en áreas de fondos marinos internacionales fuera de la jurisdicción nacional.
El gobierno de México firmó el Tratado Global de los Océanos y ha mostrado históricamente una postura y compromiso con la protección de los océanos. Al tener el rol de Presidencia del Consejo en la 28° Sesión de la ISA, es necesario que mantenga y refuerce su credibilidad hacia la protección de los océanos impidiendo el inicio de la minería submarina. La Alianza Oceánica Sostenible agregó que la minería en aguas profundas es una de las cinco grandes amenazas que actualmente enfrentan los océanos