El papa Francisco se encuentra despierto después de la operación y ya ha hecho una broma, según informó el doctor Sergio Alfieri durante una conferencia de prensa en Roma.
El pontífice ha reaccionado favorablemente a la intervención y a la anestesia, afirmó el médico.
Previamente, la Oficina de Prensa del Vaticano había informado que el papa Francisco ingresó al hospital para someterse a una cirugía abdominal y que se esperaba que permaneciera hospitalizado durante varios días.
“Después de la Audiencia General, Su Santidad se dirigió al Hospital Universitario A. Gemelli, donde se sometió a una cirugía abdominal laparotómica con implantes, bajo anestesia general”, dijo el Vaticano en un comunicado previo.
La intervención quirúrgica, programada en los últimos días por el equipo médico que atiende al sumo pontífice, se ha vuelto necesaria debido a una hernia incisional lacerada que está provocando síndromes suboclusivos recurrentes y dolorosos”, informó el Vaticano en un comunicado emitido este miércoles.
Técnicamente conocida como laparotomía, esta intervención requiere anestesia general y tiene como objetivo reparar una hernia. Según fuentes médicas, es probable que esté relacionada con la cirugía a la que el papa Francisco se sometió en 2021 para extirparle la mitad de su colon.
El portavoz del Vaticano, Matteo Bruni, también expresó que se espera que el papa se recupere por completo funcionalmente.
La estancia del papa en el hospital en Roma “durará varios días” para permitirle un “desarrollo postoperatorio normal”, según se indica en el comunicado del Vaticano.
La cirugía del papa se lleva a cabo un día después de que fuera llevado a un hospital de Roma para someterse a exámenes de control. El papa regresó a su residencia más tarde ese mismo día.
Francisco fue ingresado en el hospital a finales de marzo debido a una infección respiratoria que posteriormente se diagnosticó como bronquitis. Recibió tratamiento con antibióticos intravenosos y fue dado de alta después de tres días.
Además de su cirugía de colon hace dos años, el papa Francisco tuvo una parte de su pulmón extirpada después de sufrir una grave neumonía cuando era joven en Argentina. Más recientemente, en 2019, se sometió a una cirugía ocular en la Clínica de Pío XI en Roma para tratar una catarata, y también ha enfrentado dolores crónicos de ciática.
Durante el último año, también ha experimentado problemas en la rodilla que lo han limitado al uso de un bastón o una silla de ruedas.
En caso de que Francisco quedara incapacitado durante un período de tiempo, el Vaticano podría enfrentarse a una especie de crisis constitucional. En el sistema católico, no existe un “vicepapa” que pueda ejercer la autoridad del papa en su ausencia.
El secretario de Estado del Vaticano, actualmente el cardenal italiano Pietro Parolin, puede encargarse de la gestión diaria, pero no tiene autoridad para nombrar obispos o crear o suprimir diócesis en todo el mundo.
En una entrevista con el diario español ABC en diciembre del año pasado, Francisco reveló que había redactado una carta de renuncia en caso de incapacidad médica permanente poco después de su elección en 2013, según informó CNN.
A pesar de sus problemas de salud, el pontífice tiene programados algunos viajes para el segundo semestre de 2023, incluyendo uno a Mongolia del 31 de agosto al 4 de septiembre, que será uno de los lugares más remotos que ha visitado, y la asistencia a la Jornada Mundial de la Juventud del 2 al 6 de agosto en Portugal.
