Las autoridades de Moscú han prohibido el uso de drones en la capital tras denunciar un supuesto ataque ucraniano con dos vehículos aéreos no tripulados contra el Kremlin. El alcalde de la capital, Serguéi Sobinian, informó en su canal de Telegram que la decisión fue tomada para evitar el uso no autorizado de drones que obstaculizaría el trabajo de los servicios de seguridad. Sin embargo, los drones que se usan con fines estatales sí podrán volar en el espacio aéreo de la capital. Sobianin advirtió que el lanzamiento no autorizado de un dron es un delito y conlleva responsabilidades administrativas y penales.
El Kremlin ha acusado a Ucrania de lanzar dos drones contra la residencia principal del líder ruso, Vladimir Putin. Según Moscú, los drones fueron destruidos antes de que pudieran atacar y no causaron víctimas ni daños materiales. El Kremlin ha tachado el supuesto intento de ataque de “acto terrorista” y ha dicho que el ejército ruso y las fuerzas de seguridad inutilizaron los drones antes de que pudieran atacar. Putin no estaba en el Kremlin en ese momento y estaba trabajando desde la residencia oficial en Novo-Ogaryovo. El gobierno añadió que Putin estaba a salvo y seguía trabajando sin cambios en su agenda.
Las autoridades ucranianas no han hecho comentarios al respecto, y el Kremlin no ha presentado pruebas del supuesto incidente, el cual ha sido considerado por el Kremlin como un intento deliberado de atentar contra la vida de Putin antes del Día de la Victoria, que Rusia celebra el 9 de mayo.