Morelia, Michoacán, a 15 de enero del 2020.- La capital michoacana y Ciudad Patrimonio de la Humanidad, ofrece a sus turistas y visitantes experiencias resguardadas en extraordinarios monumentos arquitectónicos que te llevan a otras épocas.
Los turistas y visitantes que llegan a Morelia durante todo el año, tienen la oportunidad de conocer el centro histórico perfectamente conservado; su arquitectura barroca de cantera rosa; conventos y palacios que albergan música, arte popular y espacios de creación artística; la Universidad donde se gestó la semilla de la independencia; las artes celebrada a través de festivales; un café bajo los portales, por todo ello, Morelia está más viva que nunca.
En la Capital Michoacana existen pinturas de arte dignas de conocerse, cuadros que nos trasladan a otras épocas, y un magnífico ejemplo es “El traslado de las monjas”, la joya del Museo Regional de Michoacán, un enorme lienzo que narra el traslado de las monjas de clausura de Santa Catalina de Siena a su nuevo convento en procesión solemne, un acontecimiento excepcional que sucedió el 3 de mayo de 1738 y que, retrata la sociedad virreinal con exquisita fidelidad y detalle, por ese realismo, Diego Rivera lo consideró una obra maestra.
Si se quiere conocer esta historia, les proponemos seguir los pasos de las monjas, el antiguo convento de Santa Catalina de Siena es hoy el prestigioso Conservatorio de las Rosas. Entra al claustro, quizás te acompañe en tu paseo un coro, un piano o un clarinete. El templo del convento, conocido como Templo de las Rosas, luce tres imponentes retablos de los s. XVII y XVIII dedicados a la Virgen de Guadalupe, a San Juan Nepomuceno y a la coronación de la Virgen María.
Imaginemos la procesión de las monjas saliendo por Nigromante hasta llegar a la Calle Real, hoy Madero. La comitiva gira a la izquierda y continúa hasta el Templo de las Monjas, tal y como refleja el lienzo. Al igual que en el Templo de las Rosas, una celosía permitía a las monjas asistir a misa sin romper la clausura. Fíjate en el Cristo de pasta de maíz. A un costado del templo, el antiguo convento, destino de las monjas, es hoy el Palacio Federal.