Morelia, MIch.- 5 de marzo de 2020.- “En México es impostergable la puesta en marcha de acciones integrales para garantizar un entorno libre de violencia para las mujeres, pues persiste la violencia de género y feminicidios, y es evidente la omisión del Gobierno Federal” , subrayó el coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXIV Legislatura, Antonio Soto Sánchez.
“El Estado Mexicano no debe ser cómplice de la violencia de género y feminicidios; invisibilizar – lo que ocurre en nuestro país – es un atentado contra la sociedad en su conjunto”, puntualizó.
La complicidad del Estado Mexicano, ante la violencia feminicida, ha puesto en mayor vulnerabilidad a las mujeres, a tal grado que, sólo tres de cada diez feminicidios son esclarecidos.
Antonio Soto urgió al Gobierno Federal a invertir en la prevención, atención, eliminación y combate de la violencia, lo cual debe ser una prioridad en la agenda política de nuestro país y no el vender cachitos para el avión.
El líder de la bancada perredista manifestó su apoyo total a las mujeres y se pronunció por trabajar juntos para frenar la violencia de género; tarea en la que, el Grupo Parlamentario del PRD, impulsa una agenda integral en beneficio de todas, desde el Congreso del Estado.
El diputado manifestó su respaldo el Paro Nacional de Mujeres convocado para el próximo 9 de marzo, al considerar que esta protesta contribuirá a visibilizar, aún más, la violencia de género que viven muchas mujeres en el país, la cual debe ser combatida y erradicada.
El Gobierno Federal, con hechos y en todas las acciones, debe dejar de manifiesto que el combate a la violencia de género y la protección de los derechos de las mujeres es una prioridad, ya que se está enviando mensaje de incapacidad y permisibilidad a la violencia feminicida, que se agrava lamentablemente, día a día, en nuestro país.
Los asesinatos de mujeres reflejan la ausencia de una política pública que protega la libertad e integridad y la vida de este sector de la población, pues se carece de políticas públicas integrales que atiendan de fondo este problema, que aqueja y lastima a todo el pueblo mexicano.
Reprobó que la violencia contra las mujeres, en México, se institucionalice, ya que los últimos estudios revelan que la violencia familiar se ha incrementado y que las acciones puestas en marcha, no están dando resultados.