La crisis del agua que empieza a acrecentarse cada año en México, debe ser tomada con toda seriedad por los gobiernos y la sociedad, con acciones eficaces que nos permitan contrarrestar esto que sin duda puede convertirse en un problema de dimensiones catastróficas, subrayó la diputada Araceli Saucedo Reyes.
La coordinadora del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado, refirió que si bien desde hace ocho años la Constitución General de la República prevé el acceso, disposición y saneamiento del agua como un derecho humano, la realidad nos muestra un panorama muy diferente.
Refirió que las regiones del sureste presentan dos terceras partes del agua renovable en el país, con una quinta parte de la población que aporta la quinta parte del PIB nacional. Las regiones del norte, centro y noroeste cuentan con una tercera parte del agua renovable en el país, cuatro quintas partes de la población y de la aportación regional al PIB nacional, según los datos de la Comisión Nacional del Agua.
La diputada por el Distrito de Pátzcuaro apuntó que México sólo registra un nivel de cumplimiento a 25 por ciento en cuanto a servicios de agua bien gestionados, tomando en cuenta que la Organización Mundial de la Salud establece como la cantidad mínima de agua que una persona necesita para poder vivir dignamente entre 20 y 50 litros diarios.
“En el caso de Michoacán, el agua renovable per cápita es de dos mil 723 metros cúbicos, mientras que en Chiapas es de 21 mil 199 metros cúbicos, en Oaxaca de 13 mil 765 metros cúbicos, y en Tabasco de 12 mil 909 metros cúbicos”.
Araceli Saucedo Reyes recalcó la necesidad una mayor infraestructura para el tratamiento del agua, ya que mientras Baja California tiene un caudal tratado de 13 metros cúbicos por segundo, en estados como Zacatecas o Aguascalientes apenas si llega a 0.17 metros cúbicos por segundo, mientras que en Michoacán son 3.20 metros cúbicos por segundo.
