El Parlamento de Hungría ratificó la unión de Suecia a la OTAN, levantando el último obstáculo para su entrada el día de ayer lunes 26 de febrero.
El ingreso de Suecia a la OTAN clausura dos siglos de política neutra, de no alineación tras un proceso agitado y completa la entrada de toda la región nórdica en la Alianza, reforzando el control de la organización en el Mar Báltico y se convierte en el 32° miembro de esta.
El primer ministro de Suecia, Ulf Kristersoson, expresó a través de su red social X que “ha sido un gran día para Suecia y la seguridad sueca. Es un día histórico”.
El inicio de la intervención militar de Rusia en Ucrania en febrero de 2022 provocó a Suecia y Finlandia replantearse su no alineación y tras meses de solicitud de ingreso enviada y aprobada dicho año en junio en la cumbre de la OTAN en Madrid se concretó.
En términos históricos el ingreso de Suecia a dicha organización ha sido relativamente rápido, a pesar de tardar un año más que Finlandia, debido a las reticencias de Turquía y Hungría quienes han buscado obtener algún rédito político.
Con toda la región nórdica en la OTAN y el control de la región báltica se afectará la capacidad de movimiento de la flota rusa en San Petersburgo y Kaliningrado.
Suecia cuenta con la mayor fuerza área de los países nórdicos y una de las industrias nacionales de defensa más destacadas en Europa Occidental .
No obstante, el ingreso a la OTAN, a pesar de tener el respaldo de la gran mayoría parlamentaria de Suecia, ha sido criticado por fuerzas políticas como el Partido Izquierda Socialista y organizaciones pacifistas mencionando que no se convocase a un referendo. Además, aluden al posible emplazamiento de armas nucleares en el territorio. (EFE)