Monterrey, Nuevo León a 19 de junio de 2020.-
Ante las crisis sanitaria y económica por la que atraviesa el país
debido a la epidemia del COVID-19, el Gobernador de Michoacán, Silvano
Aureoles Conejo, dio a conocer las bases necesarias para la discusión
pública de cómo enfrentar el impacto de la emergencia sanitaria,
acordadas durante la Reunión Interestatal de ocho gobernadores.
“Este escenario hace impostergable el diálogo y la reflexión
entre niveles de gobierno, poderes del estado y sociedad civil, para
encarar esta doble crisis”, señaló Aureoles Conejo.
Explicó que la contingencia sanitaria ha traído consigo una
crisis económica urgente de atender, al registrar daños en desempleo.
“A este escenario se suman los primeros impactos de la profunda
crisis económica que, en un mes, ha provocado la pérdida de un millón
30 mil empleos formales en el país, de acuerdo con las cifras del
Instituto Mexicano del Seguro Social” agregó el mandatario.
Por ello, dio a conocer el documento que contiene los 12 puntos
para enfrentar la crisis, construida con los gobernadores Francisco
García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas; Jaime Rodríguez Calderón, de Nuevo
León; Miguel Riquelme Solís, de Coahuila; José Rosas Aispuro, de
Durango; José Ignacio Peralta, de Colima; Enrique Alfaro Ramírez, de
Jalisco, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo; de Guanajuato y Silvano
Aureoles Conejo de Michoacán.
PRIMERO. Encarar la doble crisis bajo principios federalistas,
es decir, a partir de la coordinación plena y un diálogo útil y
productivo entre la Federación, los Estados, y Municipios.
SEGUNDO. Reorientar los recursos necesarios hacia Estados y
Municipios, para atender de manera oportuna la emergencia sanitaria, la
crisis económica y la pérdida de empleo.
TERCERO. Incrementar el presupuesto destinado a los sistemas
estatales de salud, a través de mecanismos como el préstamo otorgado al
Gobierno de México por el Banco Mundial, con el objetivo de
fortalecerlos en los rubros de personal, infraestructura, insumos y
medicamentos.
CUARTO. Revisar y adecuar el Pacto Fiscal para revertir las
desigualdades en la distribución de los recursos de la hacienda pública.
QUINTO. Construir desde la Federación, un plan de largo
alcance, que contemple las medidas contraciclicas necesarias para
enfrentar la crisis económica.
SEXTO. Impulsar un programa amplio para el rescate de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).
SÉPTIMO. Realizar un análisis del Ingreso Básico Universal,
como una medida que garantice mínimos de bienestar a los más de 50
millones de mexicanas y mexicanos en pobreza, y 10 millones que según
algunas proyecciones de la CEPAL, caerán en ella como consecuencia de la
epidemia.
OCTAVO. Realizar una Convención Nacional Hacendaria, donde se
analice el modelo de tributación en México, y encaminar esfuerzos hacia
una progresiva reforma fiscal.
NOVENO. Analizar y considerar el seguro de desempleo como un
alivio rápido y efectivo ante la pérdida de empleos formales y la
pérdida de ingresos en los sectores informales.
DÉCIMO. Utilizar todos los mecanismos, con los que cuenta el
Estado Mexicano, como deuda o apertura a organismos internacionales,
para dotar de recursos al país.
UNDÉCIMO. La reactivación económica y social debe tener un
enfoque de sustentabilidad, que garantice la conservación y el uso
sustentable de los recursos naturales.
DUODÉCIMO. Posponer proyectos federales que difícilmente
aliviarán la crisis en el corto plazo, como la refinería de Dos Bocas,
el Tren Maya, el Aeropuerto Santa Lucía, o el programa Sembrando Vida.