Morelia, Michoacán, a 18 de noviembre de 2019.- El más importante proyecto de formación y producción musical del Festival de Música de Morelia Miguel Bernal Jiménez (FMM), La Sinfonieta FMM, conquistó al público asistente a su primera presentación, enmarcada en las columnas de piedra del edifico barroco que alberga al Ayuntamiento Moreliano.
Iniciaron el concierto las notas de una solitaria trompeta, ubicada en el pasillo superior del inmueble, la que instantes después hizo silencio para dar paso a un segundo instrumento, el cual hizo lo propio al aparecer una tercera trompeta; luego un alternado diálogo entre las dos primeras para que, finalmente, se estableciera un coloquio general entre los instrumentos de viento. Se trataba de la Fanfarria para 3 trompetas “San Edmundsbury”, del compositor inglés Benjamín Britten. Desde ese momento los aplausos del público premiaban la actuación de los solistas.
Luego vino lo que podemos llamar el plato fuerte de la tarde; la sección de cuerdas integrada por 17 de los 38 músicos, ejecutó con gran maestría la pieza En los tiempos de Holberg, opus 40, con sus 5 movimientos. Se trata de una obra escrita por Edvard Grieg para conmemorar el bicentenario del escritor noruego Ludwig Holberte, y aunque originalmente era para piano, más tarde el propio autor realizó la versión para cuerdas.
Fue tal la pasión que los músicos imprimeron a esta ejecución, que al terminar la pieza, el Director Juan Felipe Molano, aplaudió efusivamente la interpretación.
Luego, tocó su turno a los alientos, 8 jóvenes recreando la Petite Symphonie de Charles Gounod, estrenada hace 134 años en París y que, a decir de los críticos, es de una elegancia impecable, misma elegancia que le imprimió la Sinfonieta del Festival y gracias a la cual los ejejcutantes arrancaron del público un sensible aplauso.
Satisfechos de su trabajo como tutores, los maestros Guillermo Portillo y Fernando Domínguez hicieron su aparición en el escenario, como una muestra de aprobación a tan excelente trabajo.
Para cerrar con broche de oro, el Director Juan Felipe Molano decidio incluir una pieza del compositor francés Claude Bolling, Suite No. 1 para flauta, piano, persución y contrabajo, en la que el autor deja de manifiesto su pasión por el jazz, género que ya interpretaba a los 14 años.
Gracias a esta pieza, el público asistente pudo constatar la calidad interpretativa del pianista Érick Ruiz Mendoza, y del percusioista Daniel Felipe Castañeda López, quienes se acoplaron perfectamente con contrabajista y flautista, al ritmo de las contrastantes notas del jazz.
La ovación del respetable fue unánime, apenas había sonado la última nota cuando el público que había llenado el recinto hizo estallar un prolongado aplauso, que tal vez no sólo era para los 38 músicos de la Sinfonieta, sino para una iniciativa del Festival de Música de Morelia que agrega a la historia musical de Michoacán un grupo que en su primera actuación demostró estar a la altura de cualquier ensamble sonoro, no sólo de América, sino del mundo.
Las reacciones
En un breve sondeo realizado al final del concierto, los entrevistados coincidieron en señalar que el nivel interpretativo de la orquesta recién formada superó las expectativas y que, de seguir así, pronto logrará alcanzar una buena posición entre las orquestas de jóvenes del país.
Los Tutores
Por su parte, los tutores Guillermo Portillo y José Luis Gálvez, opinaron que el nivel interpretativo de cada uno de los integrantes de la Sinfonieta es bastante alto y que, afortunadamente, el resultado del trabajo realizado en las dos últimas semanas quedó de manifiesto en el concierto.
Comentaron también sobre la dificultad que significó realizar la selección para la integración del ensamble, pero que ahora que ya escucharon los resultados están seguros de haber tomado la mejor decisión.