Miles de migrantes de distintos países han llegado a la ciudad de Tapachula, en la frontera sur de México, con la esperanza de poder cruzar a Estados Unidos cuando expire el Título 42, medida que fue adoptada por el expresidente Donald Trump y continuada por el actual presidente Joe Biden, con el fin de expulsar a migrantes alegando razones de salud pública durante la pandemia del COVID-19. Esta medida finalizará el próximo jueves, lo que ha generado una ola migratoria de alrededor de 5.000 personas en la región.
Los migrantes interpretan la desaparición del Título 42 como una oportunidad para ingresar a Estados Unidos, pese a que se mantienen otras restricciones y medidas migratorias, lo que ha generado incertidumbre y temor entre ellos. Muchos de los migrantes que llegaron a Tapachula urgen acelerar los permisos del Centro de Atención Provisional (CAP), donde se expiden documentos que les permiten estar en México por 45 días.
Autoridades migratorias mexicanas se han visto rebasadas por la cantidad de migrantes de Asia, África, Sudamérica, Centroamérica, Cuba y Haití, que siguen ingresando por la frontera sur entre México y Guatemala. Además, la región afronta un flujo migratorio inédito, con más de 2,76 millones de indocumentados interceptados por Estados Unidos en la frontera con México en el año fiscal 2022. México también ha registrado un aumento anual del 43 % en el número de “personas en situación irregular en México” en 2022, cuando detectó 444.439.