Pemex y sus proveedores y contratistas debían más de 231 mil 200 millones de pesos al 30 de junio, saldo que teóricamente debería ser saldado en menos de un año.
Sin embargo, fuentes con conocimiento del asunto, que hablaron bajo condición de anonimato, dijeron que la compañía ha retrasado los pagos a algunos proveedores pero priorizará los pagos de la compañía al final del cuarto trimestre, situación que ha creado incertidumbre para la empresa.
Al cierre de junio, la empresa había pagado 2.146,3 millones de pesos, un aumento del 5,4 por ciento.
Sin embargo, el pasivo corriente incluye pagos pendientes a proveedores y contratistas por 231 mil 200 millones de pesos, según un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
Jesús Carrillo, director de economía sustentable de Imco, dijo en entrevista que las deudas con proveedores y contratistas están aumentando, las cuales combinadas con otras obligaciones, en su mayoría de corto plazo, ascienden al mismo monto que el nivel actual.
El volumen de negocios de la empresa, que también fue uno de los factores que condujeron a la reducción de la calificación crediticia.
