Revocación del mandato y sus resultados; el análisis de la Dra. Yurisha Andrade Morales

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Revocación del mandato y sus resultados

Yurisha Andrade Morales*

El ejercicio de revocación del mandato vivió su jornada de votación el pasado 10 de abril. Se trata de un hecho histórico que inauguró otra modalidad de los mecanismos de democracia participativa directa que buscan empoderar a la ciudadanía y someter, cuando sea necesario, a malos gobernantes a evaluación de su gestión, a rendición de cuentas y, si se cumplen las reglas previstas en la ley, retirarlos anticipadamente a la conclusión de su encargo.

            Con experiencia acumulada en más de tres décadas organizando procesos electorales, el INE desarrolló la revocatoria con la colaboración de poco más de 12 mil capacitadores y supervisores electorales que notificaron a 6.1 millones de mexicanas y mexicanos que fueron sorteados para integrar las mesas directivas, siendo designadas 287 mil personas en los cargos de las 57 mil 448 casillas, aprobadas para recibir la opinión de más de 92.8 millones de votantes.

            De acuerdo con los datos dados a conocer por el organismo electoral, para la difusión del ejercicio y la promoción de la participación ciudadana se transmitieron más de un millón 95 mil spots de radio y televisión, a través de 3 mil 501 emisoras; se colocaron más de mil publicaciones en redes sociales, cuya cobertura fue superior a los 24.6 millones de impresiones; también se colocaron inserciones en 41 periódicos nacionales y 270 estatales, cuyo tiraje total alcanzó 13.4 millones de ejemplares; se abrió un micrositio que registró más de 581 mil visitas; además de tres foros nacionales, foros estatales y distritales de deliberación pública, con posturas críticas, a favor o en contra de la revocación.

            Durante las votaciones, las y los mexicanos testificamos que la jornada se desarrolló en paz y sin incidencias mayores. En congruencia con el conteo rápido, los cómputos distritales dieron a conocer los resultados finales. Así, en 47 mil 647 casillas no se realizaron recuentos, mientras que sí se hicieron en 9 mil 798, que corresponden al 17.05% de las instaladas. Del total de votos emitidos, por la opción: “Que se revoque el mandato por pérdida de confianza”, 1 millón 63 mil 209, esto es el 6.44%; por la opción: “Que siga en la Presidencia de la República”, 15 millones 159 mil 323, esto es el 91.86%; 280 mil 104 votos nulos, esto es el 1.69%; mientras que la participación ciudadana se colocó en 17.77%.

            Ha concluido la parte logística de la revocación del mandato. Falta el desahogo de diversos procedimientos jurisdiccionales sobre su desarrollo. No obstante, puedo afirmar que se trató de un acontecimiento importante para nuestra democracia, para la fortaleza de nuestros derechos como ciudadanas y ciudadanos. Fue la primera vez que tuvimos la posibilidad de evaluar en las urnas al primer mandatario y calificar su gestión.

            Estos mecanismos son esenciales en la construcción de nuestra democracia y su práctica nos coloca a la par de democracias consolidadas en varios puntos del planeta, pues avanzamos en la perspectiva de una democracia que promueve activamente la participación de la ciudadanía en la toma de decisiones fundamentales de su entorno y de su país.  Son instrumentos básicos para garantizar la ampliación de los derechos políticos electorales.

            La revocación del mandato, en su primera edición, ha puesto a prueba las fortalezas del sistema electoral mexicano y de sus instituciones. El reconocimiento lo merece la ciudadanía, todas aquellas personas que, de manera genuina, participaron en libertad y con apego a las normas. El éxito es de ellos. Sigue, ahora, la revisión de las reglas que rigen al mecanismo y la evaluación de quienes participaron y del entorno del primer ejercicio de revocación. Sabemos que es pertinente mejorar en varias facetas dado que más adelante, podría utilizarse también para evaluar a los gobernadores y presidentes municipales. Como posibilidad ciudadana, usémosla como solución extrema para fortalecer y no para debilitar a nuestra democracia, menos aún para generar entornos de inestabilidad política y social.

*Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán

@YurishaAndrade