El presidente de Francia, Emmanuel Macron, exhortó el viernes a los padres de familia a mantener a sus hijos adolescentes en casa y propuso restricciones a las redes sociales para apaciguar los disturbios que se extienden por toda Francia a raíz de la muerte de un conductor de 17 años baleado por la policía.
Macron afirmó que su gobierno trabajará con empresas de tecnología como Snapchat y TikTok para establecer procedimientos para “la eliminación del contenido más delicado”. No especificó el contenido que tenía en mente, pero declaró: “Espero un espíritu de responsabilidad de estas plataformas”.
Las autoridades también planean solicitar, cuando sea “útil”, las identidades “de quienes usan estas redes sociales para llamar al desorden o exacerbar la violencia”.
El mandatario afirmó que un tercio de las personas arrestadas el jueves por la noche eran “jóvenes, a veces muy jóvenes” y que “es responsabilidad de los padres” mantener a sus hijos en casa: “A veces tenemos la sensación de que algunos de ellos están viviendo en las calles los videojuegos que los han intoxicado”.
Hasta ahora, los disturbios que iniciaron el martes por la noche han resultado en el arresto de 917 personas, 492 ataques a edificios estatales, dos mil incendios a vehículos y unos 250 oficiales de seguridad heridos. Ante ello, determinó reforzar la seguridad con 45 mil elementos.
No obstante, este viernes continuaron las protestas. Nuevos enfrentamientos entre policías y manifestantes tuvieron lugar en Lyon, en una protesta prohibida por las autoridades y en Marsella, donde las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos y se reportó un saqueo en una armería, donde los manifestantes robaron varios rifles de caza, pero sin municiones. También se registraron protestas en ciudades como Grenoble y Estrasburgo.
Además, se reportó que la madrugada de ayer, un joven manifestante de 20 años murió tras caer del techo de un supermercado en Ruan, capital de Normandía.