Un dron del Ejército nigeriano terminó con la vida de 85 civiles y por lo menos 66 lesionados en el poblado de Tudun Biri, ubicado en el estado de Kaduana, en el norte de Nigeria.
Los civiles se encontraban celebrando una festividad islámica conocida como Mawlid, cuando de repente fueron confundidos con elementos yhihadistas y bombardeados por error. Por ello, el presidente del país africano, Bola Tinubu, ha deicidio abrir una exhaustiva investigación sobre los detalles del trágico suceso.
El Ejército nigeriano negó en un principio el ataque realizado, pero las pruebas mostradas fueron irrefutables y no pudieron seguir negándolo.
Asimismo, el informe local no menciona cifras, en su lugar los locales son quienes facilitaron a NEMA (Agencia Nacional de Gestión de Emergencias) los números que se tienen registrados. Amnistía Internacional informa que las cifras de civiles muertos se elevan hasta 120.
El día de ayer martes el presidente de Nigeria expresó que describe el incidente como “muy desafortunado, inquietante y doloroso”, a su vez expresa indignación y dolor por la trágica pérdida de vidas nigerianas.