
Morelia, Michoacán, a 21 de octubre de 2025.- La diputada Fabiola Alanís afirmó que la seguridad en las regiones productoras de aguacate, limón, frutillas y maíz, entre otras, es una condición indispensable para el desarrollo económico y social de Michoacán, y reconoció los esfuerzos de coordinación entre los gobiernos estatal y federal para consolidar entornos de paz en beneficio de productores, trabajadores y comunidades rurales.

Fabiola Alanís subrayó que el campo es una de las principales fuentes de empleo en Michoacán, con más de 380 mil personas involucradas en la producción agrícola, que concentra más del 13 por ciento del valor de la producción agrícola nacional.
Sin embargo, explicó que durante las últimas dos décadas, la expansión y el éxito de la agricultura comercial ha venido acompañada de retos en materia de seguridad, extorsión y control territorial, que afectan a pequeños productores y comunidades indígenas.
“La seguridad no sólo es un tema de vigilancia, es una condición para la libertad y la dignidad de quienes trabajan la tierra. Las y los productores deben sentirse protegidos por el Estado, no presionados por el miedo”, expresó.

Destacó que el Plan Integral de Seguridad para el Valle de Uruapan y la Región de Los Reyes, impulsado por el Gobierno de Michoacán, ha permitido reducir la incidencia de delitos de alto impacto mediante la presencia permanente de fuerzas de seguridad, inteligencia territorial y la articulación con los propios productores, así como la estrategia del Gobierno de México en la zona limonera de la entidad.
Asimismo, recordó que la mesa interinstitucional entre la Secretaría de Seguridad Pública, SEDENA y la Guardia Civil mantiene vigilancia continua en las zonas de mayor producción, garantizando el tránsito seguro de las mercancías hacia los centros de empaque y exportación.
Fabiola Alanís señaló que, desde el Congreso local, continuará respaldando el fortalecimiento presupuestal de los cuerpos de seguridad rural y la creación de protocolos especializados de protección al sector agrícola, con enfoque en derechos humanos y atención a víctimas.
“Michoacán no puede construir prosperidad sin seguridad. Garantizar la paz en el campo es cuidar el corazón económico del estado y proteger a quienes con su trabajo sostienen el orgullo michoacano”, concluyó la diputada.
