México ha evidenciado una política más que soberana, de obediencia frente a Estados Unidos, no solo al fungir como vigías de su patio trasero sino también, por dar la espalda a nuestros connacionales víctimas de redadas, apuntó el diputado Antonio Soto Sánchez, integrante del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática en la LXXIV Legislatura del Congreso del Estado.
La determinación del Gobierno de la República de considerar innecesario emitir una nota diplomática a nuestros vecinos del norte debido a las redadas contra migrantes que iniciaron desde el fin de semana, Soto Sánchez la calificó una abdicación de la administración lopezobradoristas a sus responsabilidades constitucionales y al deber que tiene del cumplimiento de tratados internacionales en materia de respeto y defensa de los derechos humanos.
El legislador perredista lamentó que la política exterior de México, particularmente la relacionada con Estados Unidos, sea en realidad una política migratoria disfrazada, misma que está basada en la sumisión y un entreguismo que resultan inexplicables, “No nos gustaría pensar que esa falta de voluntad y carácter del Gobierno de la República, y la complacencia que tiene con la administración de Donald Trump obedezca a acuerdos ajenos al interés nacional, y busque legitimar a futuro permanencias perversas en el poder de uno y otro lado de la frontera”.
Soto Sánchez subrayó que frente a cualquier agresión y persecución de mexicanos por parte de las autoridades norteamericanas, lo menos que el Gobierno de la República debería hacer es emitir una nota diplomática, acción que por el momento se niega a realizar, y con ello, deja a su suerte a los connacionales que hoy son injustamente perseguidos, cazados, encarcelados en tierras estadounidenses.
