Este 20 de mayo se celebra el Día Mundial de las Abejas, una fecha proclamada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para crear conciencia sobre la importancia de los polinizadores, las amenazas que enfrentan y su contribución al desarrollo sostenible.

Las abejas, junto con otros polinizadores como mariposas, aves y murciélagos, son responsables de la reproducción de casi el 90% de las plantas con flores y de más del 75% de los cultivos alimentarios a nivel mundial. Sin ellas, ecosistemas enteros y la seguridad alimentaria humana estarían en riesgo.
La fecha fue elegida en honor al nacimiento de Anton Janša, pionero de la apicultura moderna en Eslovenia, quien destacó el valor de estos insectos para la agricultura mucho antes de que se comprendiera su rol ecológico.

Sin embargo, en los últimos años las abejas enfrentan múltiples amenazas: el uso intensivo de pesticidas, el cambio climático, la pérdida de hábitat y enfermedades. Estas problemáticas han llevado a la disminución alarmante de sus poblaciones.
Organismos internacionales, científicos, agricultores y ciudadanos están llamados a tomar medidas para proteger a estos polinizadores. Acciones como reducir el uso de químicos, conservar espacios verdes y plantar flores nativas pueden marcar la diferencia.

El Día Mundial de las Abejas es una oportunidad para reflexionar sobre la estrecha relación entre la biodiversidad y el bienestar humano, y para actuar en favor de estos pequeños pero fundamentales seres vivos.
