El ex presidente de México, Felipe Calderón, y su esposa Margarita Zavala, denunciaron un intento de robo en su residencia ubicada en la colonia Las Águilas, alcaldía Álvaro Obregón, en la Ciudad de México. Según la denuncia presentada por Zavala, el suceso fue descubierto cuando uno de sus elementos de seguridad recibió una llamada desde el penal de Barrientos, en el Estado de México.
Ante esta alerta, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) acudieron rápidamente a la vivienda. Sin embargo, al revisar las cámaras de seguridad, los policías se percataron de que el individuo que se acercaba a la casa era en realidad un guardia encargado de la seguridad de la propiedad. Después de ser entrevistado por los agentes, el vigilante reveló que había recibido una llamada de extorsión en la que le solicitaban extraer objetos de valor de la residencia, a lo cual se negó al darse cuenta de que había alguien dentro de la vivienda.
Los agentes de seguridad lograron rastrear la llamada hasta la caseta de vigilancia y determinaron que provenía del penal de Barrientos. Dado que no se produjo la pérdida de ningún objeto valioso, Margarita Zavala decidió no emprender acciones legales en contra del guardia. Sin embargo, como medida preventiva, se ha instalado una patrulla para resguardar los alrededores de la casa.
