Morelia, Michoacán, a 15 de agosto de 2019.- Con una inversión de 10 millones 966 mil 982 pesos, el Estado en conjunto con autoridades federales y municipales, así como organismos internacionales e instituciones educativas, lleva a cabo la restauración de vivienda tradicional o trojes en la Ruta Don Vasco, a fin de preservar este patrimonio cultural edificado, que es parte fundamental de la identidad de la zona.
Ricardo Luna García, titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet), explicó que suman 82 viviendas tradicionales las rehabilitadas en el municipio de Charapan, como parte de la segunda fase de la intervención de la Ruta Don Vasco.
Asimismo, se hizo la entrega de 20 estufas ecológicas, la reforestación con ejemplares de pino en Charapan, Tzintzuntzan e Ihuatzio y la colocación de 36 ecotecnias en Ihuatzio y Tzintzuntzan, como baños secos, filtros de agua, cisternas y lavaderos ecológicos; a la par, se remodelará la plaza pública de Charapan y se otorgarán 74 estufas ecológicas adicionales.
Luna García detalló que los recursos fueron aportados por el Gobierno de Michoacán, a través de la Semaccdet; el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH); el ayuntamiento de Charapan; la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID); la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID); la Fundación Gonzalo Río Arronte; el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA); Cementos Mexicanos (Cemex); la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), y la Universidad La Salle Morelia.
Del monto de 10 millones 966 mil 982 pesos asignado a la segunda fase de la intervención de la Ruta Don Vasco, 8 millones 317 mil 482 pesos fue proporcionado como inversión en efectivo, mientras que 2 millones 649 mil 500 pesos correspondieron a donaciones en especie.
La iniciativa permitió la preservación de la vivienda tradicional de la región de Charapan, la troje, donde algunos de los inmuebles intervenidos suman más de 200 años, por lo que son parte fundamental del patrimonio edificado del área.
Fue en 2016 cuando culminó la primera fase del proyecto, efectuado en Tzurumútaro, Ihuatzio y Tzintzuntzan y que comprendiera la rehabilitación de 62 viviendas de adobe y techumbres de madera y teja de barro, con una inversión de 5 millones de pesos.
