La historia de Karla, entre el riesgo de ser bombera y el amor por Michoacán

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Morelia, Michoacán.- El sentimiento de miedo tiene otro significado para Karla Villalón Rentería, elemento de la Coordinación Estatal de Protección Civil, que a sus 33 años se desempeña como Bombera Paramédica.

Hoy, en su día, comparte las vivencias de la labor que realiza por el bien de las y los michoacanos.

De pequeña nunca pensó dedicarse a la protección civil, sin embargo un curso sobre primeros auxilios le cambió su perspectiva y desde hace seis años arriesga su vida para salvar la de otros.

Desde entonces, sus jornadas laborales no han sido las típicas ocho horas, ya que su horario depende de situaciones que no se pueden controlar, sus guardias son rigurosas 24 horas, donde desde la base de PC en la capital michoacana reciben los reportes del C5 de los incidentes en el estado.

Una vez que les hacen llegar la ubicación y el contexto del incidente, Karla y sus compañeros deben de estar listos en menos de 40 segundos con el equipo que resulte necesario dependiendo del accidente.

En el camino, Karla siempre tiene muy en claro el peligro de su labor.

“El miedo siempre es importante considerarlo en cada reporte que atendemos, confiar de más en uno mismo y en la situación puede resultar contraproducente, tenemos que estar siempre atentos en el mínimo detalle, como el clima y el contexto”, compartió.

De todos los llamados que ha atendido, lo que más valora es el trabajo en equipo para atender las situaciones, los paramédicos, bomberos, policías, doctores, enfermeras y demás personas que participan en los llamados, ponen todo su esfuerzo y corazón al atender a las y los ciudadanos.

“Al final del día muy bonito ver el trabajo que hacemos en conjunto con todas mis compañeras y compañeros del ámbito pues nos hemos llevado recuerdos muy satisfactorios al poner todo de nuestra parte para salvar vidas”, expresó.

Al término de la jornada, Karla tiene una familia que la espera, consciente de los peligros que su trabajo implica, pero que siempre la apoya sabiendo que su labor salva vidas.

“Yo tengo dos familias, la de sangre y mis compañeros rescatistas, nuestras actividades nos hace crear lazos muy fuertes y cuidarnos los unos a los otros siempre, como una familia”, afirmó.

Karla hace un llamado a toda la población a capacitarse, a que tengan los conocimientos básicos de primeros auxilios, ya sea en caso de sismo, de inundaciones o de otros fenómenos, pues desde su experiencia asegura que no hay nada como la prevención para evitar cualquier tipo de catástrofe o perdida humana.

En caso de emergencia el número de atención permanente es a través de la línea de emergencias 9-1-1.