El rey Carlos III de Reino Unido asistió este domingo 31 de marzo con la reina Camila a la misa de Pascua en la iglesia de San Jorge del castillo de Windsor, el cual es su primer acto público desde que se informó su diagnóstico de cáncer a inicios de febrero.
Dicha aparición es vista como un esfuerzo por tranquilizar al público después de que el monarca de 75 años se retirara de sus deberes públicos tras el informe del Palacio de Buckingham sobre someterse a un tratamiento por un tipo de cáncer no especificado.
Sin embargo, Carlos no cesó y siguió trabajando en privado, pero su aparición para un evento real como el servicio de Pascua es considerada una señal positiva.
El pasado Jueves Santo el rey Carlos III expresó en un mensaje de Pascua el compromiso que hizo en su coronación de seguir el ejemplo de Cristo de servir y no ser servido, aunque el mensaje fue difundido por medio de una grabación en una misa de la catedral de Worcester, debido a que el rey no pudo asistir debido al tratamiento al que fue sometido.
En el evento Carlos expresó que la misa de Pascua tiene “un lugar especial en mi corazón” al tener “su origen en la vida de Nuestro Señor que se arrodilló ante sus discípulos… al hacerlo les dio a ellos un ejemplo de cómo debemos servirnos y cuidarnos unos a otros”.
Asimismo, Kate Middleton, princesa de Gales, también está siendo tratada por cáncer y pausó sus deberes públicos y junto a su esposo, el príncipe William y sus hijos fueron los ausentes en dicho evento religioso. (EFE y AP)
