Imparten la conferencia “La aplicación de las ciencias de la complejidad a la solución de problemas públicos”

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La Secretaría General de la Cámara de Diputados presentó la conferencia magistral “La aplicación de las ciencias de la complejidad a la solución de problemas públicos”, impartida por José Luis Mateos, doctor en física por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

En el Ciclo de Conferencias Magistrales 2022, realizado a través de la Unidad de Capacitación y Formación Permanente, su director general, León Aceves Díaz de León, consideró que las ciencias de la complejidad resultan del mayor interés para las instituciones públicas en general, a fin de mejorar y transformar la realidad social.

“No estamos hablando de ciencia ficción”, son disciplinas que tienen un carácter eminentemente aplicado para que la acción pública logre tener impactos positivos en la sociedad.  

Las instituciones del Estado estamos obligadas a atender problemas públicos que son altamente complejos, multifactoriales, caracterizados por una gran cantidad de causas y de posibles efectos, que requieren del concurso de diversas disciplinas para la mejor comprensión de todos esos fenómenos, con el propósito de formular buenas políticas públicas para su atención.

Con ello, se propicia conocer el por qué y cómo el pensamiento complejo puede ser aplicable y deseable en el ámbito público, temática de la que no se habla mucho, pero es de la mayor relevancia y en el Servicio Civil de Carrera de la Cámara de Diputados se ha abordado en la formación que se les imparte a sus integrantes.

La relevancia de mirar y analizar los problemas públicos como asuntos complejos requiere múltiples miradas disciplinarias, para su comprensión, agregó.

Conferencia magistral

El coordinador de Investigación en el Centro de Estudios de la Complejidad en la UNAM, conocido como C3, José Luis Mateos, apuntó la importancia de la administración pública como la Cámara de Diputados, cuyo reto es mayúsculo para entender cómo legislar y diseñar mejores políticas públicas ante la complejidad de los problemas.

El C3 es un centro que está en la búsqueda de soluciones a los complejos problemas y retos del país, que data de hace 10 años, es un punto de encuentro de las diferentes ciencias y humanidades. Es el primero en su género al inicio del siglo XXI en México, explicó.

Mateos resaltó que la interdisciplina de las ciencias será un elemento fundamental para buscar soluciones a los problemas en el presente siglo, al destacar que usando técnicas de la física y las matemáticas se pueden extraer datos de las diversas actividades humanas, a fin de conocer sus tendencias en el corto, mediano y largo plazos para identificar soluciones viables a determinados desafíos.

Señaló que una red compleja proviene de una teoría matemática que data de hace 200 años, como el conjunto de puntos conectados con enlaces, que representan conexiones entre muchos fenómenos y actividades humanas, desde uniones biológicas hasta financieras.

Asimismo, para conocer conexiones en muchos tipos de redes, como las del cerebro, con 100 mil millones de neuronas, a través de las neurociencias; ecológicas con millones de especies naturales o que crea el ser humano, así como en el transporte, las relaciones sociales donde confluyen 7 mil millones de personas, las económicas e incluso las oscuras y criminales.

Al referirse a la violencia, consideró que de no detectar bien de dónde vienen los problemas no se podrán resolver, pues al igual que en otros mamíferos los hombres compiten entre ellos, son más violentos que ellas, un patrón que se observa desde la infancia y se comprende desde la psicología evolutiva, además de que han adoptado estrategias de cooperación que le han permitido crear toda la civilización.

Comentó que combatir la violencia con campañas de spots televisivos y de radio no han sido exitoso y una de las razones es porque se trata de algo muy profundo que tiene una raíz evolutiva de millones de años. “Es como querer combatir el miedo a las alturas o las arañas con algo televisivo”.

Dijo que se debe reconocer la magnitud del problema para plantearlo mejor, ya que la violencia no es meramente cultural, y se debe ir más allá en una discusión que nunca se ha escuchado. “No debemos decir una serie de estrategias, sino replantear todo”.