La policía afirma que durante los últimos cuatro años de servicio ha experimentado acoso debido a su negativa a involucrarse sentimentalmente con alguien, a seguir órdenes infundadas y a no presentar cargos contra personas inocentes. Estas situaciones la han llevado a enfrentar procesos legales y a confrontarse con altos mandos de la Policía Municipal.
Viridiana sostiene que, a pesar del creciente número de mujeres que desean hacerse escuchar dentro de la corporación, se enfrentan a dificultades constantes, ya que son amenazadas con medidas disciplinarias e incluso la pérdida de sus empleos. Por esta razón, hace un llamado a las autoridades competentes.