AL GOBIERNO FEDERAL LE FALTA RECONOCER A LAS MUJERES
Por Fany Santiago
En México la violencia que se ejerce en contra de las mujeres y niñas cada día va en aumento, tan sólo en enero de este año de acuerdo a datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública se registraron 73 feminicidios y desafortunadamente llegó la pandemia del Covid-19 a principios de marzo para dar paso a un confinamiento que se ha alargado ya por más de dos meses.
Lo preocupante recae en que durante enero y marzo la cifra de mujeres asesinadas es de 964 de los cuales 244 son clasificados como feminicidios esta última cifra representa un aumento del 1.6 por ciento de feminicidios comparado con el primer trimestre de 2019.
Desde que Andrés Manuel López Obrador tomó posesión como presidente de México, no se ha visto ni una sola política pública para atender temas de género, no hay protocolos ni medidas para prevenir ni erradicar la violencia en contra de las mujeres, sino todo lo contrario hubo lastimosos recortes a 26 programas dirigidos a mujeres como promover la atención y prevención de la violencia, recortaron presupuesto para estancias infantiles y para refugios a los que acudían mujeres víctimas de violencia.
Ante todas estas cifras y datos reales, el gobierno federal insiste en hacer caso omiso, hacer oídos sordos y no reconocer que con el aislamiento la violencia en contra de las mujeres sí aumentó, tan sólo en el mes de marzo hubo más de 150 llamadas de mujeres al 911, 155 por día, pidiendo apoyo por sufrir violencia física, acoso, violencia sexual. López Obrador insiste en negar la cruda realidad a que cientos de mujeres que enfrentan y padecen en sus hogares.
Es una muestra de irresponsabilidad, misoginia, machismo, falta de sororidad y de sensibilidad tratar de invisibilizar la violencia en contra de las mujeres, al aseverar que las llamadas al 911 son falsas y que en los hogares predomina la fraternidad, cuando es en los hogares donde están los agresores.
Lo más preocupante es que esta crisis sobre este tema ya estaba antes de la pandemia y que desafortunadamente acrecentó con ella, haciendo que los refugios para mujeres víctimas de violencia sean insuficientes, sin embargo, los que operan en el país de acuerdo a datos de la Red Nacional de Refugios de marzo a mayo han recibido a 4 mil 153 personas, 69 por ciento víctimas de violencia.
Es claro que no se generó un plan para las mujeres en los diversos aspectos, es claro que las prioridades para el gobierno federal son proyectos que cumplen con intereses personales y un claro ejemplo es la construcción del Tren Maya o Dos Bocas y no las llamadas al 911 de las mujeres y sus hijos que sufren algún tipo de violencia.
Lamentablemente activistas alertan a que, si el confinamiento por esta crisis sanitaria se extiende, la violencia en los hogares irá en aumento y una vez concluida la etapa de aislamiento vendrán otros factores como el económico que podrían ser detonantes para que no cese la violencia en contra de las mujeres.
Ante ello ya el gobierno federal debería estar diseñando un plan para hacer frente también a esta problemática que nos lastima y nos preocupa, pero el mandatario mexicano sólo descalifica, porque las cifras no coinciden con sus datos porque esta pandemia le ha venido “como anillo al dedo” para ejecutar otros planes y otros temas que no generan el bienestar de las y los mexicanos.
Las mujeres ya demostramos unión y fuerza, demostramos que no nos van a callar que vamos a seguir levantando la voz, que no estamos solas y que seguiremos luchando para frenar todo tipo de violencia. #NoEstásSola.