El ex primer ministro de Pakistán, Imran Khan, fue arrestado el martes en Islamabad por varios cargos de corrupción. Agentes de seguridad lo sacaron a rastras del tribunal donde comparecía y lo metieron a la fuerza en un auto blindado antes de llevárselo.
La detención ha sido condenada por sus aliados y su partido ha protestado ante el Alto Tribunal de Islamabad. Khan, que fue depuesto en abril de 2022, afirma que su salida del gobierno fue ilegal y ha hecho campaña contra el gobierno de su sucesor, el primer ministro Shahbaz Sharif. Tras la detención de Khan, se produjo una escaramuza entre partidarios del exmandatario y la policía ante la corte, donde algunos abogados y seguidores resultaron heridos, así como varios policías. Khan ha sido trasladado a la ciudad fortificada de Rawalpindi, cerca de Islamabad, donde sería interrogado en las oficinas de la Oficina Nacional de Responsabilidad.
